El Jardinero

-El Jardinero-

Hoy dì la vuelta por mi patio y no encontrè flores en mi jardìn. Con el descuido y el ajoro de cada uno de ustedes se olvidaròn de mis flores y la mala hierva los abrazò. Sus tallos estaban cubiertos de enrredaderas y casi mi luz no se reflejaba en tus hojas. Vi como el pasto de la inestabilidad '' del doble ànimo'' subia y acficciaba mi jardìn. La arena del talùd que te hace competir con los demàs enterrò parte de los capullos que estaban apunto de abrir.

Mucha gente a venido a mi iglesia y nisiquiera se percataron que tù eres parte de este jardìn. Hoy comensarè con mis manos a arrancar el abrojo de tu amargura y las espinas de culpar a los demàs por tus fracasos... cuando realmente eres tù quien no me deja bendecirte. Mis manos estàn sangrando como cuando fuì crucificado. No me importa sufrir por ti solo quiero limpiarte.

Como las hormigas al hablar mal de tu hermano, has picado una y otra vez a los demàs. Con la queja me has dado tristeza y como el morivivì que solo de tocarlo se oculta ha si te enojas cuando te hablo para correjirte. Algunas de las rosas ya no danzan como antes y la azuzena de la pasiòn por mi esta partìda. Las tres amapolas rojas que sembrè un dìa (compasiòn, misericordia y amor) no tienen polem para darle a las abejitas de la gente que llegaron vestidos de diambulantes.

La margarita blanca te pedì que le cambiaras la tierra, que la movieras a la sombra por que ya no podìa sobrevivir EN EL PUEBLO DE LOS OBSTACULOS. Si la hubieses dejado en aquel lugar se le hiban a desprender sus pètalos. Esta flor especial necesita humedad de dulzura y rocio de sacrifìcio. No me cuestiones mas el por que te pedì que la movieras EN SU TIEMPO LO ENTENDERAS. Dejame cortar y arracar todo lo que no te deje crecer. Dame la oportunidad de limpiar tu fè. Quiero devolverte la frescura de mi espiritu santo. Si tan solo tu quisieras podrìas volver a danzar. Harè brotar una nueva flor en tu vida.

Si cada una de ustedes, mis flores, entendieran lo importante que son para mì y cuanto me duele que sufràn de sed teniendo la lluvia de mi palabra. No quiero que te seques y tampoco que otra flor ocupe tu lugar en mi jardìn . TE QUIERO A TI: Rosa, Amapola, Orquidia, Tulipàn, Clavel, Azuzena, Lirio...todas son indispensables en mi jardìn.

Recibe mi rocio, recibe mi resplandor y llena de flores el jardìn de mi iglesia.

TE AMA EL JARDINERO-TU DIOS

Autora: Linette Rivera
Administrador: Yoseph Villafañe
Inspiraciòn: Dios